sábado, 2 de agosto de 2014

Mi opinión sobre la explotación del oro de San Juan

Por: Cassandro Fortuna

Mi estimado amigo Atilito Peguero, amigo desde  nuestros años de adolescentes en San Juan de la Maguana, dice que quiere saber mi opinión con relación a la explotación del oro de las minas de nuestra provincia. Aquí le va.

Mi opinión es que toda mina se debe explotar, así como que cada muchacha, por bonita, virgen e inocente que sea,se debe casar. Una mina sin explotar es cualquier cosa, menos una mina. ¿Qué ventajas tiene una mina que no sea su potencial de explotación y generación de riquezas?
Esa es nuestra primera precisa.
La segunda es que una mina, cualquiera que fuere, debe explotarse de acuerdo con las técnicas adecuadas. Y eso ya es otra cosa.
No me imagino condenando a una compañía  minera porque quiera explotar una mina. Como no me concibo criticando a un médico porque esté ejerciendo la medicina. Y no es un juego de palabra.
Si es porque la compañía minera es extranjera, es muy lamentable. Lo ideal seria que esas minas fueran explotadas por alguna empresa minera sanjuanera, pero ello no es posible porque en nuestro pueblo, y en nuestro país, no tenemos entidades que se dediquen a esas extravagancias. Los inversionistas sanjuaneros, y sus iguales en el resto de la nación, me parece que colocan sus recursos económicos en otros tipos de negocio.

Ese oro tiene miles de años en las entrañas de las montañas sanjuaneras. Es tiempo de sacarle provecho. Y esa es nuestra tercera premisa. Vamos a sacarle ventaja a esos recursos naturales, y vamos a hacerlo ahora.
Explotar la mina de oro no debe ser ningún problema, sino todo lo contrario, debemos inquietarnos si ese oro se queda en las entrañas de la tierra, a donde no sirve para nada.
Solo hay dos cosas que deben preocuparnos:1. que la extracción del oro se haga de una forma tal que no dañe la ecología del valle, y 2, que los beneficios a recibir sean proporcionales con la ganancia de las mineras.
 Esos dos aspectos, para mí, son in negociables. Si  somos capaces de ponernos de acuerdo en estos dos asuntos no veo qué puede impedir la explotación de nuestras minas.

Si alguien puede demostrarme lo contrario, con argumentos razonables, se lo agradecería.



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